El Real Madrid contaba con dos grandes alicientes de cara al Clásico de Las Vegas, que asimismo suponía su debut en la pretemporada. Carlo Ancelotti quería ver a sus nuevas piezas en liza y Antonio Rüdiger y Aurelien Tchouaméni fueron, con mayor o menos grado de sorpresa, titulares en el primer once del técnico italiano. Con el mediocentro galo algo tímido en sus acciones y entregado al dominio del Barça, fue Rüdiger el que se llevó los focos por su posición sorpresiva, su carácter de líder y un rendimiento notable en 45 minutos que dejan al aficionado merengue con ganas de más.
Rüdiger se estrenó como titular pero probablemente no en la posición que esperaba. El internacional alemán ha jugado en su carrera deportiva como central izquierdo, en línea de dos y de tres, pero nunca, al menos con continuidad, como lateral en esta banda. Ahí le alineó Ancelotti, dejando sin tocar la pareja de centrales Militao-Alaba y demostrando que su confianza en el nuevo fichaje es tal que incluso cuenta con él en el puesto en el que teóricamente menos adaptable es dentro de la defensa.
Con 29 años y una personalidad que atraviesa muros, Rüdiger no sólo no puso ninguna pega sino que fue uno de los destacados de la primera mitad en clave Real Madrid. Sin complicarse en salida de balón y cerrando bien su banda, el alemán dejó registros de gran jugador pese al sobreesfuerzo de la defensa merengue ante el dominio del Barça. Hubo que sufrir y Antonio lo hizo con nota, incluso en una acción, convertida en viral, en la que Araujo le gana una carrera. Al final de esta, el jugador culé tendría que hacer un centro forzado porque Rüdiger no perdió ni un momento la posición.
Sin embargo, la acción por la que se ha distinguido a Rüdiger en el partido y que muestra su carácter es la tangana provocada por una fea entrada de Alba a Vinicius, y en la que el alemán apareció en segunda instancia, cuando vio a sus compañeros en peligro, para arramplar con todo a su alrededor. Acabaría enganchado con Araujo, tomando la responsabilidad en la disputa y después de salvaguardar a todos los de blanco, pese a que apenas lleva unos días compartiendo entrenamientos y vida con ellos. Un auténtico hombre de equipo.
Rüdiger completó 45 minutos de partido y fue reemplazado en el descanso por Ferland Mendy, que teóricamente será el titular en el sector zurdo, con Nacho y el propio internacional alemán como parches y Alaba, que en palabras de Ancelotti «sólo será lateral izquierdo por necesidad», ya que no quiere romper a priori la pareja de centrales que forma con Eder Militao.
Tchouaméni, sólo detalles
Si Rüdiger acabó el partido con notable, Aurelien Tchouaméni no pudo pasar del aprobado en su debut, aunque dejó algún detalle de lo que podemos acabar viendo en él como mediocentro del Real Madrid. El galo también salió de inicio y pudo ganar alguna acción con el físico descomunal que atesora, aunque con el balón aún se puede esperar mucho más, principalmente, porque el dominio del Barcelona no dejó actuar a sus anchas al trío de presente y futuro que formó junto a Fede Valverde y Eduardo Camavinga.